Todos los años, gentes de todo tipo de razas, procedencias, credos y naciones, parten desde Roncesvalles empeñados en un único afán: llegar a Santiago de Compostela.
Bien sea cumpliendo una promesa, en busca de una religiosidad perdida, para conocer la famosa comunión entre peregrinos conseguida en las duras jornadas de camino o, tal vez, como un desafío deportivo más... Sea cual sea la motivación, todos están de acuerdo en una cosa: no se arrepienten en absoluto de haberlo iniciado.
Hoy es el mejor momento para comenzar el camino,si te gusta esto, haz la prueba, no te arrepentirás, veras q2ue riqueza interior puedes adquirir
ResponderEliminarestamos muy contentos con los comentarios
ResponderEliminarMe gustaría recorrerlo. En verano.
ResponderEliminarMe encanta este artículo. Enhorabuena!
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